Ciutat Vella recupera la figura de Salomó Ben Adret al dedicarle una calle

Barcelona 10-11-2018 / El primer teniente de alcaldía, Gerardo Pisarello, acompañado de Silvia Leida, presidenta de ATID, y de representantes de las comunidades y entidades judías de Barcelona, presidió ayer el acto de descubrimiento de la placa que da nombre a la calle de Salomón Ben Adret, hasta ahora Santo Domingo del Call, en Ciutat Vella.

Se atiende así una demanda histórica de las comunidades y entidades judías que consideraban una infamia que el pogromo de 1391 se perpetuara en las calles de la ciudad, despreciando la memoria de las víctimas.

Para Pisarello, el cambio de nombre «es un homenaje a la Barcelona plural, diversa, la ciudad de paz abierta a las diferentes culturas, creencias religiosas o ideológicas. Barcelona no permitirá nunca que el veneno del antisemitismo, de la islamofobia y de los discursos de odio pueda aterrizar en esta ciudad. En un momento en que en Europa se levantan los viejos fantasmas del odio, de la barbarie en Alemania, Italia, Hungría y tantos otros países, es muy importante lanzar, desde Barcelona, ​​el mensaje de que estamos orgullosos de la aportación que la comunidad judía ha hecho en esta ciudad y concretarlo en el nombre de Salomón Ben Adret, uno de los barceloneses más influyentes de su época, del siglo XIV, y que es símbolo de la voluntad de pacto, de inteligencia, de diálogo ante todas las formas de fanatismo e intolerancia», dijo Pisarello en su intervención.

El nombre que ha generado el consenso de las entidades y comunidades judías, y también dentro del Consistorio, es el de Salomón Ben Adret, rabino de Barcelona durante más de cuarenta años, y una figura capital en la historia de la cultura catalana medieval, referente de convivencia en la ciudad y uno de los talmudistas más reconocidos de la Edad Media.

Lejos de evocar una figura tan preeminente en ámbitos como la teología, la filosofía, la poesía y hasta la cábala, la calle hasta ahora se llamaba San Domènec del Call y recordaba el asalto que se inició el cinco de agosto de 1391 y se alargó hasta el 8 de agosto, día de Sant Domènec, cuando durante tres días se atacaron personas, saquearon y destruyeron propiedades y documentos y fueron asesinados 300 judíos.

El descubrimiento de la placa, una vez se ha tramitado el expediente por parte de la Ponencia del Nomenclátor, se ha hecho coincidir con la conmemoración de la Kristallnach, la llamada Noche de los cristales rotos, que cada año se organiza en memoria de la madrugada del 9 al 10 de noviembre de 1938, en que el régimen nazi comenzó una ola de terror contra los judíos.

Foto: Ayuntamiento de Barcelona

Contacto: barcelonaaldia21 (arroba) gmail.com

Subir ↑