Barcelona 7-2-2019 / Agentes de la Guardia Urbana de Barcelona han empezado hoy a utilizar en periodo de pruebas unas cámaras de vídeos que llevarán algunos agentes a la altura del pecho y que podrán grabar actuaciones comprometidas o especialmente conflictivas. La previsión es que las imágenes ayuden a reducir la conflictividad.
En parte, porque los individuos que sean grabados corren el riesgo de que el vídeo se utilice como prueba en contra de ellos si se derivan consecuencias penales de la acción que motiva la grabación. Asimismo, podrá servir para clarificar actuaciones que podrían ser polémicas de los agentes. Desde la Guardia Urbana se confía que sirvan para reducir las denuncias por supuesta mala praxis profesional.
Por ahora, la Guardia Urbana cuenta con 12 cámaras, que están probando policías de los distritos de Ciutat Vella, Eixample y de la Unidad de Soporte Policial, los antidisturbios del cuerpo. Hasta final de junio se probaran tres modelos, a fin de decidir cuál es el más idóneo.
La grabación no se podrá editar y permanecerá bajo custodia de la Guardia Urbana. El agente iniciará la grabación pulsando un botón cuando lo crea conveniente. Entonces, la cámara incorporará al vídeo los 30 segundos anteriores al momento de ponerla en marcha. La guardia Urbana considera que estos dispositivos son «un paso adelante en la transparencia del servicio y en la evaluación y mejora de las actuaciones del cuerpo».
Según se informa en la web de a Guardia Urbana «la utilización de los dispositivos se ha de hacer con respeto escrupuloso a los principios de oportunidad, proporcionalidad y de congruencia, principios básicos que han de regir toda actuación policial»
Fotos: Ayuntamiento de Barcelona